La industria que agoniza

Hasta hace unos años los mayores ingresos de los artistas eran, en primer lugar, la venta de discos, y luego lo que sacasen de conciertos. Desde el punto de vista del negocio, el producto que los artistas generaban eran los discos, y los conciertos quedaban como una extensión a éstos (giras de promoción).

Ahora, con el avance digital, el abaratamiento y difusión de ordenadores personales y la posibilidad de editar música de calidad con software muy barato (a veces, hasta de licencia libre), la cantidad de nuevos artistas está en auge, y con lo fácil que es difundir una obra a través de Internet (ya sea P2P, Rapidshare, o lo que venga), han convertido éstas (las obras) en publicidad, mientras que son los conciertos los que han subido a la categoría de producto. Y ahora, es todo ese tinglado que hay detrás de los discos, y no de las obras, lo que agoniza.

Ahora quien decide si un artista vale la pena es el propio usuario, ya sea con un mail, un tweet o una recomendación por last.fm. Ya no son necesarias las radios para anunciar nada, porque el hecho de que no representen ni el 1% de la música que se genere ese mes, es simplemente nada.

Heridas de guerra

xDDD, así me quemé yo la pierna, una Nit de l'Albà, hace 3 años. Aunque con ciertas diferencias:

1. Era una carretilla de las que no explotaba al final (que por cierto, las de trueno, aún las siguen tirando en Elche, a pesar de estar prohibidas hace años, y es el segundo de los motivos por los que no me apetece repetir).
2. Fue algo fortuito: la carretilla iba a ras de suelo y al pegar a un bordillo rebotó hacia arriba, dándome en LA PUNTA, xD (no me libré de la hinchazón de la misma, ni del amoratamiento).
3. Tardé varios segundos (interminables, xD) en ser consciente de la situación, agarrar aquello sin quemarme la mano y soltarlo en otra dirección (darle un manotazo al azar podía empeorar las cosas, e.g. mis huevos aún podían ponerse por en medio; no quise tentar mucho más a Murphy).
4. Me hizo un boquete en el pantalón, y dos en la pierna derecha, el más profundo de los cuales (entre 2 y 3 cm de profundidad) tardó 6 semanas en generar costra, y alguna más en tener piel.
5. Nadie lo grabó (una pena, porque hubiese sido un puntazo como tarjeta de presentación: "mire, señor, qué entereza, qué serenidad, qué huevos de quedarme mirando la jodía carretilla, sin precipitarme, ni ná"), pero me quedó una colección bastante gore de fotos de la recuperación de la pierna. Que no voy a mostrar aquí, por la salud de todos.

Visto (el vídeo) en: Un twitt

¿echo-qué?

Si Google fuese un sarcástico, ésto es lo que te diría si buscases echochrono:

Hace unos meses me enganché sobremanera al Chronotron, un juego Flash de Puzzles/Plataformas en el que, para pasar de nivel, tienes que recoger una pieza para arreglar tu máquina del tiempo averiada. No tendría nada de especial si no fuese porque cada vez que vuelves a la máquina sin la pieza, viajas al instante en el que comenzaste el nivel la primera vez, pudiendo ver todo lo que ya había hecho tu anterior yo. Así que, cada vez que entras, tienes que planificar tus acciones futuras, y ayudarte de tus propias acciones pasadas. Mira que la lío con las explicaciones, mejor juega un poco al juego, o mira este vídeo.

Después de pasármelo, estuve buscando juegos parecidos y lo único que encontré fue el Cursor*10 (y Cursor*10 2nd), en el que te dan diez cursores que duran más o menos medio minuto, y que deberás manejar uno por uno, haciendo que colaboren entre ellos para alcanzar la salida. Es más bien de habilidad, y de memorizar el camino, y no tanto de pensar en cómo resolverlo. Con las limitaciones de tiempo y cursores resulta bastante más estresante.

El caso es que en la edición de este año del E3, el equipo que hizo echochrome acaba de presentar echochrono. Una copia "barata" del Chronotron:

Y digo barata por dos motivos: por un lado, no se han calentado la cabeza en temas de originalidad, simplemente han cogido los modelos y motor gráfico del echochrome, y los han adaptado a la idea de Chronotron. Y por otro, lo han concebido con las mismas limitaciones técnicas que Cursor*10: nueve monigotes y 30 segundos por monigote. Tú prueba Chronotron e intenta petarlo. Puedes hacer muchas copias, y bajará el rendimiento y todo eso, pero lo importante es que se centraron en el problema de resolver el puzzle puramente espacio-temporal, sin tretas en forma de límites de tiempo o de copias, escenarios oscuros, etc... Podrías decir "bueno, es que la PSP no tiene tanta potencia como un PC", pero es que la complejidad de los gráficos que tienen los echo-algo es casi nada. La PSP debería dar para mucho más de nueve copias (por supuesto algún límite deberían darle, porque la memoria RAM no es infinita, pero algo lo suficientemente holgado como para no estresar al jugador) .

En fin, a ver si sacan un Chronotron 2, o incluso una versión en 3D al estilo de Portal o Mirror's Edge, eso sí, sin limitaciones.